CÓMO MOTIVAR PARA EL DEPORTE
Pensar en sus preferencias y proponerle un deporte en consonancia
El abanico de deportes que puede practicar un niño es muy amplio. Para motivar a los niños a que practiquen alguno de ellos lo mejor es pensar en sus preferencias. Podemos fijarnos en si el niño es una persona a la que le gusta trabajar en equipo o prefiere hacer sus trabajos de forma más individual y de acuerdo con esto proponerle un deporte de equipo o individual.
No hay que olvidar que los deportes individuales no vuelven más huraña a una persona porque dentro del equipo existen otros compañeros que se animan en los campeonatos. Es una opción si el niño es más independiente y no le gusta compartir las responsabilidades en un equipo.
Ver un deporte en directo
La mejor manera de motivar a los niños para que practiquen un deporte es llevándolos a ver ese deporte en directo con niños de su edad. Hay que informarse en los polideportivos cercanos al hogar o en las actividades extraescolares del colegio.
Allí el niño podrá ver si le gusta el deporte e incluso participar en una sesión. Es una buena idea hablar con el entrenador u organizador de la actividad para que intente ayudarte a motivar al niño en cuestión, enseñándole las cosas más atractivas del deporte.
Deporte y amigos
Una idea eficaz para motivar a los niños a que se apunten a una actividad deportiva es que ellos sepan que la van a poder realizar con sus amigos. Para ello, es importante con los padres de sus compañeros del colegio para que apunten a su hijo al mismo deporte.
Será además más motivador para él si es un deporte cuyo material pueda tener a mano y pueda realizar cada vez que quiera con sus amigos, como el bádminton, el fútbol, la natación (si se vive en la costa o se tiene una piscina en casa) o, si se dispone de una canasta, el baloncesto. Así se divertirá más y tendrá un tema del que hablar con sus amigos.
• Antes de elegir un deporte para el niño es importante tomar en cuenta dos aspectos: el primero de ellos es lo que el pequeño desea, pues algunos manifiestan claramente sus preferencias ya sea porque le atrae la práctica, porque sus compañeros están en esa actividad etc
• El segundo son las propias capacidades del peque: si sabe o no seguir instrucciones, si puede permanecer tranquilo escuchando a alguien hablar, si le gusta estar en compañía de otros niños, si es un líder o es más bien del tipo callado. Dependiendo de su personalidad puede que convenga un deporte más que el otro
• Antes de los 6 años a los pequeños les resulta difícil comprender las reglas en su totalidad, es solo después de esta edad que algunos conocimientos más complejos serán simples a su entendimiento. Ya después de los 12 años el grado de exigencia y competencia deportiva puede ser mayor
• Para comenzar puede ser bueno escoger un deporte del tipo integral que involucre varios músculos para beneficiarlo en su totalidad. Una gran opción es la natación en la que hay interacción con otros niños pero a la vez se evalúa un desempeño personal
• El fútbol es el favorito de muchos padres cuando se trata de un varón, pero hay cosas que es necesario evaluar como por ejemplo las habilidades motoras del pequeño, su capacidad para dedicarse a esta actividad y sobretodo el modo en el que se lleva a cabo el entrenamiento pues con niños pequeños las exigencias no pueden ser muy grandes
• Deportes como el baloncesto o el tenis son también indicados para niños de todas las edades. El primero es al igual que el fútbol grupal, donde el trabajo en equipo es la base fundamental, el segundo es de carácter individual pero permite la relación con otros niños
• Las artes marciales son también opciones predilectas y ofrecen al niño la oportunidad de aprender grandes valores como las capacidades de su propio cuerpo y la no violencia, pues estas disciplinas se basan en practicas milenarias es las que la última finalidad es agredir al otro. Es un buen canalizador para peques más agresivos
• En el caso de las niñas es muy común que se apunten en prácticas como el ballet o la danza, solo recuerda que la pequeña debe desear hacerlo realmente pues se tratan de actividades muy demandantes con un alto nivel de exigencia y si ella no lo disfruta no tiene propósito
• En niños pequeños de 3 a 5 años se recomienda ampliamente la natación pues ofrece la capacidad de desarrollar puntos importantes como el equilibrio, la coordinación y la disciplina
• Hasta los 8 o 10 años tu hijo puede comenzar a experimentar con varios deportes grupales o individuales para poder desarrollar sus propias preferencias y gustos. A esa edad ya tendrá la capacidad de decidir cuál le agrada más e incluirlo en su rutina diaria dedicándole el tiempo que requiere
• Recuerda que lo más importante es que tu hijo consiga aprender y divertirse practicando ese deporte y no que la actividad se convierta para él en una fuente de estrés y tensiones, por eso déjalo probar hasta que elija uno en el que se sienta a gusto
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